Información y consejos para prevenir la demencia senil

A medida que nos hacemos mayores, es muy frecuente notar que tenemos fallos de memoria y que nuestra capacidad para recordar se va viendo mermada y puede derivar en la demencia senil.
La demencia senil son un conjunto de síntomas adquiridos de tipo cognitivo y conductual tales como: confusión mental, pérdida de memoria, deterioro intelectual, desorientación, disturbios en el lenguaje, etc.
La Enfermedad de Alzheimer supone entre el 60% y el 80 % de los casos de demencia y se estima que en España hay actualmente entre 600.000 y 1 millón de pacientes diagnosticados de la Enfermedad de Alzheimer, el principal tipo de demencia a partir de los 65 años de edad. Un diagnóstico temprano de la enfermedad y el tratamiento preventivo son fundamentales y pueden ayudar a retrasar la enfermedad.
No podemos luchar contra el paso del tiempo, pero sí que podemos llevar a cabo algunas acciones que pueden ayudarnos a prevenir la demencia senil, a continuación detallamos algunas:
1. Reforzar el entorno social. Tener un grupo de amigos y familiares pendiente es clave. No solo para ejercitar la memoria sino para evitar el aislamiento que puede resultar en accidentes y confusiones.
2. Leer todos los días ayuda a ejercitar nuestro cerebro. El periódico es tal vez la mejor herramienta para este ejercicio. Con leerlo todas las mañanas se están reforzando las señales de rejuvenecimiento celular al cerebro.
3. Aumentar el consumo de vitamina B6. Además de ayudar contra la migraña y la depresión, reduce el deterioro cognitivo. Hay que comer legumbres, nueces, cereales y pescado.
4. Crear una rutina diaria. Establecer un horario fijo para las actividades diarias ayuda a ejercitar la memoria.
5. Reacomodar espacios. Las personas con demencia senil tienden a desubicarse fácilmente y perder la noción del espacio. Es mejor reubicar muebles y elementos básicos en lugares claves para evitar accidentes y episodios de angustia.
6. Hacer ejercicio también es fundamental. Dedicar mínimo 45 minutos a alguna actividad como caminar, trotar y, en el mejor de los casos, correr, ayuda no sólo al corazón, sino a oxigenar el cerebro y de paso rejuvenecer células y retrasar problemas motores.
7. Jugar. Sudoku, cartas, juegos de memoria, rompecabezas son indispensables para mantener el cerebro en buen estado físico. Es importante adoptarlos como una actividad diaria, y a la misma hora si es posible, para reforzar el ejercicio.
En el Centro de día Abastos ofrecemos el servicio de ayuda a domicilio en Valencia en el caso de que, por las preferencias familiares o las condiciones de los ancianos no sean las más adecuadas para desplazarse.